Sin diálogo con los estudiantes, en la UV parece que nos quieren enseñar la pedagogía del silencio

Norma Trujillo Báez

Los estudiantes y algunos catedráticos esperaban un “diálogo abierto” para abordar las agresiones de los ocho universitarios y sobre la inseguridad que aqueja a la comunidad universitaria, sin embargo, no fue así, al “Foro Universitario en contexto de violencia, análisis, crítica y propuestas”, la rectora de la Universidad Veracruzana, Sara Ladrón de Guevara, solo llegó a dar la postura institucional, “un buen discurso” calificado por algunos, pero con el gran reproche que había incumplido a su palabra, no hubo ningún intercambio de ideas con los estudiantes y por eso, todos los asistentes cuestionaron esa actitud.

En la entrada del Museo de Antropología había un cerco de seguridad, personal de la UV, pedían credencial para entrar, después los asistentes deberían registrarse. Mientras algunos esperábamos la llegada de la rectora, ella lo hizo por la puerta trasera. Así empezó un diálogo que no fue diálogo, porque “ella se fue, ella nos dejó”, reprochaban los estudiantes.

Sara Ladrón de Guevara, entró con un discurso crítico de la inseguridad que se vive: “es demasiado ya, el precio que como sociedad hemos pagado por una violencia injustificable, inadmisible y, desde todas las perspectivas posibles, rechazable. Unamos fuerzas y esfuerzos por acabar con esa violencia y por lograr —parafraseando a Rosario Castellanos— que la paz se siente entre nosotros”.

”Repudiamos de la manera más firme la reciente agresión a un grupo de jóvenes, provenga de donde provenga; pedimos enfáticamente a las autoridades de justicia del Estado de Veracruz que se esclarezca convincentemente el ataque del 5 de junio y que se deslinden las correspondientes responsabilidades”
Demandamos al Estado respeto a los universitarios, rechazamos cualquier tipo de violencia del Estado que se ejerza o se pretenda ejercer sobre los integrantes de la UV, señaló Ladrón de Guevara y sostuvo que la UV rechaza también todo tipo de violencia surgida de los universitarios y entre ellos, tanto dentro como fuera de las instalaciones universitarias. En la Universidad, lo hemos dicho reiteradamente, caben todos los pensamientos, incluso los más radicales, lo que no tiene cabida es la violencia.

Foto tomada de Facebook

Aunque la rectora de la Universidad Veracruzana pronunció la frase que han utilizado los estudiantes en las manifestaciones: “Sí tocan a uno, nos tocan a todos”, también los acusó de “actos violentos” descargados contra el edificio de Rectoría el 8 de junio y lo calificó como una "autoagresión", pese a que el rompimiento del cristal a un costado de la puerta del edificio A fue de manera accidental.

Al concluir su discurso-posicionamiento, sin anunciar que se retiraba, la rectora salió del auditorio, por la puerta de atrás se alejó para no ser cuestionada. Esta acción fue tomada por los estudiantes y académicos como “irresponsable”.
Joaquín Murguía, Mayeli Ochoa y Ana Krystel Martínez Méndez, expusieron sobre cómo habían llegado al acuerdo con la rectora para entablar un diálogo, “nosotros queríamos un diálogo con ella, ella aceptó, se comprometió, pero ella se fue… queríamos decir el acoso que estamos viviendo, pero ella nos dejó.. ella había comprometido que se iba a quedarse con un diálogo”.

Desde la UV se nos quiere enseñar una pedagogía del silencio 

Los aplausos para los jóvenes se escucharon… se sumaron voces que también decían que era una irresponsabilidad la de la rectora, “es una grosería lo que ha hecho la doctora. Yo vengo convocado a un diálogo y con quién voy hablar si la persona que nos convocó nos da la espalda”, dijo por su parte el académico Rafael Talavera de la Garza.

Los estudiantes aprovecharon el espacio para hacer público su sentir, su pensar, aunque “parece que desde la UV se nos quiere enseñar una pedagogía del silencio”, pero hay materias que nos enseñan a ser críticos, dijo Krystel , estudiante de Antropología, y entonces narró las agresiones y acoso en su contra por agentes del estado “la semana pasada, el martes 11 de junio, tras la reunión con la rectora y al llegar a la Unidad de Humanidades un auto Toyotota rojo los estaba siguiendo: Era un auto Toyota Corola Rojo con placas Ykl-3888 con dos personas pelonas abordo nos seguían. Y esto nos lo alertaron vecinos de la zona de Humanidades por eso pedimos garantías a las autoridades universitarias, pero vemos que no hay voluntad”.

Y así el recién egresado de Sociología, Joaquín Murgía hizo los recuentos de las agresiones estudiantiles, desde 1968, 1970, 2012, 13 de septiembre de 2013, ”hay antecedentes al 5 de junio y no queremos un Ayotzinapa, el ataque lo sentimos todos”.

“Nosotros no queremos que se incremente el número de policías, ni cámaras de seguridad, lo queremos es garantía a nuestra seguridad física y solo nosotros confiamos en nosotros. Y nosotros mismos tenemos que vigilarnos y protegernos”

Académicos exhiben falta de encargado de política universitaria 

Pero ante la ausencia de la rectora, el catedrático de Contaduría y Administración, Alejandro Saldaña, desmenuzó el mensaje de la rectora, lo cuestionó y dijo que no se necesita hacer un homenaje a las víctimas, porque éste no puede ser más que la justicia, hacerles justicia.
Pero fue más allá, al no estar presente la rectora, el también investigador de la UV, se preguntó ¿Con quién hablo?, ya que dijo no había una autoridad encargada en ese momento para tomar decisiones. Estaba ahí la secretaria académica, Leticia Rodríguez , a la que le dijo es otra su función, al igual al resto de funcionarios universitarios que se encontraban allí. Ante ello apuntó que en la estructura de la UV , no hay un secretario general como en el resto de las universidades del país, que se encargue de los aspectos políticos-universitarios.

Acotó que se dice desde la UV que se apoya a los ocho estudiantes agredidos el 5 de junio pero que ¿Hay una comisión de seguimiento? , que acompañe a los padres de familia, que los acompañe en las demandas, ¿Entonces cómo se va a dar un avance?. Nadie da respuesta.

Mientras que Juan Capetillo, coordinador de Asuntos Estudiantiles culpó al discurso agresivo, el tono hostil de los estudiantes, de la Asamblea Interfacultades, hace que no exista un acercamiento.

Foto tomada de Facebook

Los estudiantes les respondieron que por qué metía en este momento a la Asamblea Interfacultades, este era otro momento.

Si no hacemos nada, después estaremos buscando a nuestros compañeros en fosas

Un estudiante propuso que la UV contribuya a la gestión de alumbrado público alrededor de las unidades que lo necesiten, como Humanidades, donde la violencia en el área se ha incrementado.

También propuso la creación de grupos de guardias universitarios, integrados por alumnos, académicos, investigadores, trabajadores, funcionarios, egresados, voluntarios, vecinos de la UV, que se preocupen por la hija, sobrina, nieto, alumna o profesor que se encuentren en la comunidad universitaria.

El Estado percibe a los estudiantes como criminales en potencia, una amenaza para los intereses económicos y políticos de unos cuantos. Vivimos en la criminalización de la protesta social, en el amordazamiento de la sociedad a través de una supuesta guerra contra las drogas y vivimos en la lucha encarnizada por los recursos naturales”, dijo Joaquín Murgía

Otra estudiante, expuso que lamentan el ataque del 5 de junio a ocho de sus compañeros: "Nos entristece, llena de rabia y nos indigna porque hoy la violencia toca y mancha de sangre a nuestra comunidad” y se dirigió hacia la rectora, que no estaba allí, “las circunstancias han cambiado, son mucho más graves y ameritan algo más que un comunicado y mensajes de 140 caracteres en Twitter; la instalación de las cámaras en Humanidades que causó tanto rechazo poco o nada pueden hacer ante este contexto de violencia”.

Lo que queremos pedirle es que nos acompañe, pero hoy no está aquí y, que nos acompañen también los directores, maestros, investigadores, que lejos de tomar una posición políticamente correcta, dimensionen la brutalidad del ataque, que entiendan que si no hacemos nada la próxima vez muy probablemente estaremos buscando en fosas a nuestros compañeros.

Alejandro, otro estudiante propuso una reunión con el gobernador Javier Duarte, para exigirle cese al acoso, al hostigamiento que padecen los universitarios.

Por su parte Mayra Ledezma, académica de la UV, lamentó la salida del foro de la Rectora porque es ella quien debería encabezar y debe haber acciones más que posturas en un discurso y propuso a no quedarse en un foro y hacer reflexiones sobre la violencia y, cuestionó que no estuviera presente la comunidad universitaria y consejeros universitarios.

Y agregó, “la Universidad tiene serios problemas, y yo entiendo, puedo entender el papel que tiene que representar la doctora Sara frente a las autoridades, la Universidad tiene un problema muy serio porque su autonomía no es tal, porque financieramente la universidad no es autónoma, dependemos de que el Gobierno del Estado le pase dinero. ¿Y qué paso el año pasado, cuántos millones de pesos no le entregaron a la Universidad, dónde están y los que no entregaron este año?”.